Muchachooosss!!!
Disculpen la tardanza. 10 días afuera y en estas fechas, generan kilombos laborales y encima bajar a tierra después de este increible viaje, cueeeeesta y mucho.
Anduve leyendo algunos malintencionados comentarios (Capo) en cuanto mis habilidades orientativas y...
jajaja
La única cag... que me mande en esta fué no perderme!!!
Buen muchachos, ahi va la primera parte del relato, espero les guste Abrazooooo
PINAWALA 2009 – ALTA TRAVESIA MARACA
Un nombre particular:
CACANO: Primitivos habitantes de una zona de Catamarca. Los Cacanos bautizaron a esas tierras con el nombre de "PINAWALA", que en lengua cacana significa "Penetración a la montaña". Todos nombres y referencias, que de una u otra forma nos acercan al corazón de esta travesía
...algo me huele mal!!!
Cuenta la historia, que el gran cacique cacano (y su compañera de ruta), fué secundado por un grupete, que se hacía llamar, "escuadrón dinamita". Este grupo, se paseó por rutas, caminos y huellas del NOA, dinamitando (de ahí su nombre), todos los baños que encontraron en su camino. Ante esta irremediable compañía, el gran cacique cacano,... si bien primero cacano, cacano, al final cacasi,… el también dinamitó!!
Black Bondi: TLC
Gran Cacique Cacano: Ale Danzi
Fiel Compañera cacana: Nancy
La Colo: TSW4
Incapampa: Cacano bolita
Fredy: Cacano de apoyo
Santi: pequeño Cacano
La idea era la siguiente: Recorrer la R40 Norte, desde San Juan a La Quiaca, como objetivo principal, desviando luego por trazados, que sumaran belleza de paisajes y algo de mayor dificultad, sin perder de vista el objetivo inicial. El recorrido empezaría con un enlace a San Juan y ya dentro de la R40, otro enlace y otro, y otro… 3.000 km. de ruta, 2.500 de ripio, 500 de huellas de cordillera andina, llegando en varias oportunidades, casi a los 5.000 mts. permaneciendo 5 días a mas de 4.000 y 10 días de convivencia, daban al viaje condimentos mas que interesantes.
Dia 1: Enlace a San Juan (1100km) Si bien estaba todo previsto, los últimos contactos con la "citi", no son fáciles, dejar el trabajo y ausentarse 10 días complica y bastante. Por ese motivo fué imposible combinar horarios de partida y el grupo se encontró en el primer destino, San Juan, para hacer la primer escala cacana.
Día 2: San Juan-Tinogasta (560km) Este recorrido, sirvió para adentrarse muy de a poco en lo que sería el trayecto. Los paisajes comenzaban a impresionar. Si bien la altura a la que ibamos a ascender, no era mucha (Tinogasta esta a 2050mts). Ya los cerros se veían plenos y anticipaban lo que vendría. A partir de ahí y saliendo de la traza de la ruta, cruzaríamos la cordillera de San Buenaventura, atravesaríamos la Caldera del Cerro Blanco y bajaríamos por el campo de piedra pomez, llegando a El Peñón al atardecer. Jachal, Huaco, Guandacol, el recuerdo de Villa Unión y el primer gran regalo que nos hace este viaje: La cuesta de Miranda. Si bien Don Miranda no estaba, la recorrimos sin problema y admirando cada centímetro.
Día 3: San Buenaventura, Caldera del Cerro Blanco y campo de piedra pomez (255km.) Después de dos días de excelente clima, el cielo amaneció amenzante, una tomenta en la altura, ibamos a ascender hasta los 4.500mts., no es un buen plan. Sin embargo el grupo no dudó y emporendió su marcha, sabiendo que de no cambiar las cosas ibamos a tener que abortar, buscando alguna alternativa al recorrido trazado. Ya a esta altura el GPS bolita, empezó a dar problemas, por lo que el Profe Danzi, se convirtió en la obsesión del grupo que iba en la Colo, la consigna era no perderlo de vista. A medida que empezamos a subir, por los caminitos que nos llevarían a los altos de San Buenaventura, gracias a la fructífera negociación que llevé adelante con el barba, el cielo empezá a mostrarnos ese celeste intenso que caracteríza los cielos puneños. Al llegar al punto más alto, el clima era soñado y el paisaje no daba respiro. Las rocas de distintos colores, mezcladas con arena blanca, volcánica, nos arrancaba de los ultimos rastros de “citi” que nos quedaban y ya estabamos inmersos en la magia andina. Entrando en el arenal, ya la huella desaparecía, era hora de “enchufar la doble”, el camino se hacía pesado. Aunque en bajada, las trepadas hacían gritar los motores, que humeaban negro y el pasiaje se transfomaba de manera incesante, arena, lajas, piedras y ripio se mezclaban. Aunque de baja dificultad para el manejo, la sensación de manejar en esos lugares, superó mis expectativas. Sensación que no se agotó nunca. Tratando de esquivar el “mar de olas” (campo de pedregullo volcánico que se extiende por kilómetros, formando pequeños medanitos que parecen arena playera), Según Fredy, tierra de los Viborosaurius reptus, o rectus, espcie que dejo una estela, una Estela Artois, y fueron viborosaurius reptus curvus.Dimos un rodeo, que nos demandó unas tres horas, refrescadas por litros de agua que nos protegían de la altura y siempre entreteniéndonos; el paisaje. Seguimos en la suave pendiente y aparece a lo lejos, el Carachi Pampa, un volcán que de lejos, parece un sombrero mejicano (Ale), una elevación no muy alta, en relación al terreno que transitábamos, pero que llama la atención por su oscuridad a pleno sol, cubierto por gigantes escoriales de piedras negras. Uno lo va siguiendo, mientras baja y no puede dejar de mirarlo, es sorprendente… Casi al atardecer, cuando el sol invita a las fotos, aparece el campo de piedra pomez. Quiero hacer un alto en este punto y referirme a lo que significó para mi estar ahí. Uno de los primeros paisajes que me subyugaron cuando empecé a soñar con estos viajes. Recorrí fotos de Viajeros, del Tano Baldi, del Colo y de varios que pasaron, pero estar ahí era como llegar a la luna. A mi luna o a una de mis lunas. A esos lugares que uno sueña con vivir, pero que en el fondo piensa que es un imposible. Fue cumplir con algo de lo mucho que uno le pide a esta vida. La increíble rudeza de las piedras, aún con su blancura, el tamaño de las formaciones y las tonalidades que toman con el sol te dejan en éxtasis. Asi,… me encajé en el arenal!!!
Al rescate vino “José Malaco” anclado a la Super TLC y me llevo al piso firme, jeje
Después de las fotos, ya estabamos cansados. La altura gasta… queríamos llegar, pero siempre mirando por los espejos, como se alejaban esos gigantes blancos. Siempre el Carachi de marco, nos guiaba a El Peñón.
Día 4: El Galán – Salar del hombre muerto – ADLS – El Peñón (345 Km) El vino en el norte es mas pesado. Asi y todo madrugamos con un sol increible y el cielo mas azul que nunca. La trepada al Galán es maravillosa. Uno no se da cuenta de que va subiendo, salvo por el humo negro de los vehículos; y apenas arrancamos por el vistoso pueblito de El Peñón, es todo para una foto continua. La quietud del lugar se transmite a los visitantes y se transforma en una ansiedad por ver “la autopista mas ancha del mundo” (Danzi) que se atenúa con las vicuñas que se cruzan, las distintas tonalidades del paisaje y las dos lagunas que dan preámbulo a lo que vendrá. La hediónda, (creo), que nunca superó a los dinamita y la Laguna Grande, plagada de flamencos rosados que, sin ensayo, dan su propio espectáculo. No vuelan, solo están ahí... hasta que uno se acerca, toma sus fotos y solo después, como avisando que se viene la obertura, levantan un elegante vuelo bajo, para orillarse cansadamente, como si les afectara la altura, a pocos metros. Al llegar a la bajada al crater, uno toma conciencia de donde está: 4800mts de altitud. Frente a un cráter de 40km de diámetro, que algun día estuvo activo. Por el se puede circular a mas de 100km/h, sin problemas. De fondo, Laguna de Diamante, mezcla de sal y agua verde claro, a la distancia. Comenzamos la bajada en baja- da para ir despacio, lajas por todos lados y al final, otra vez alta (altísima) y a darse el gusto de mirar el velocímetro a 4500 mts. s/n del mar y a mas de 100km/h. Ya en la increible laguna de diamante, fotos y reposición de combustible de los tanques auxiliares y en marcha nuevamente rumbo al salar del hombre muerto, recorrido que nos llevará por arenales, bastante pesaditos y la Vega de Colifalla. El salar aparece como intrascendente, fotografiamos la tumba que da el nombre al lugar y rodeamos el salar apreciando su inmensidad, sin mayores sorpresas. Ya tomando la ultima curva y bordeando el camino de la mina de litio F.M.C. Aparece el borde opuesto del salar de un verde maravilloso, único, una tonalidad no descriptible... (fotos) Ya después nada puede superar lo visto por ese día, aunque todavía faltan las Vegas de Paycuqui y AdlS. Exelente camino de regreso, pasando por ADLS, dejamos algunas donaciones y otra vez... el mágico camino a El Peñón: El Carachi y su pampa, el Jote y los 7 jotitos, el... todo increíble. Noche en El Peñón y otro tintillo al haber...
Día 5: El Peñón – Cachi (510 Km.) Continuará…
Mención especial: Ale Danzi. Viajar con Ale es una garantía. El tipo tiene todo previsto. Conoce la zona mejor que si hubiera nacido allá. Cada varianate, cada camino, huella o enripiado tiene un comentario, una referencia. De este modo uno se ubica, no solo en el camino recorrido sino también en las posibles variantes, retomes por si surgen problemas, lugares de abastecimiento, futuros viajes y todo lo que se te ocurra. Ademas, la buena onda frente a las eventualidades que siempre surgen, impresionante. El GRAN CACIQUE CACANO, se llevó todos los premios y los agradecimientos
Ale: El profe... nunca mas merecido. Gracias totales!!!
Fredy: La buena onda constante. Descubrimos un tipo, que ha viajado, conoce de hacer llevaderos los interminables caminos polvorientos que te desgastan y cansan. Conoce de vinos
(importantísimo). Siempre dispuesto a dar una mano. Un compañero de primera.
El grupo funcionó perfecto. Nos cag... de risa diez días que hubieramos querido que no terminen nunca
Disculpas: Estuve renegando con internet toda la mañana para garcar las fotos...
es imposible. En la semana voy a subir de a poco
Abrazo!!!!
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